Untitled Document

 

"Nada podemos esperar sino de nosotros mismos"   SURda

www.surda.se

 

 

15-06-2021

 

CONSPIRACIÓN ARRIBA Y ABAJO, AFUERA Y ADENTRO

 

SURda

Notas

Opinión

 

Marcelo Marchese

 

Para colmo, los emails publicados de Fauci y amigos, aún con sus párrafos censurados, informan que desde el principio estos "objetivos" científicos no sólo estaban preocupados por demostrar, a como diera lugar, que el virus había surgido de un mamífero alado, sino que ya tenían resuelto que la solución a lo que fuera que ocurriera sería la vacuna.

Lo que estos científicos objetivos y puros estaban interesados en demostrar, sirve para advertirnos de una subversión de LA CIENCIA, o al menos, de una subversión del pretendido método científico que nunca jamás nadie siguió en esta tierra. Para tal método, uno debe hacer una hipótesis, luego experimentar y observar para ver si esa hipótesis es correcta y luego sacar las conclusiones. Ahora, uno no debe de antemano tener una idea fija y acomodar las pruebas para convencer a la masa acerca de la verdad de la idea fija. Puede hacerlo, sin embargo, y de hecho, es lo que se hace, pero eso iría exactamente ciento ochenta grados en dirección contraria a la promocionada hasta el hartazgo asepsia del método científico.

Esto es lo que hicieron Fauci y colaboradores, todos científicos "independientes" que en rigor están vinculados, por fas o por nefas, al pulpo de los laboratorios, es decir, al imperio financiero, pero además, ab ovo, resolvieron que la humanidad convertida en un conjunto de borregos debería ir por la manga derecho a la vacunación, que es la fase en la que nos encontramos ahora.

Si alguien quiere leer un informe detallado de esta matufia, le recomendamos el artículo del amigo Aldo Mazzucchelli (1) donde usted podrá encontrar firmes argumentos si pensaba que toda esta operación fue craneada con suficiente tiempo, y de tal forma, que la estructura estaba piafando en la gatera atenta al disparo de largada.

Uno se esperanza considerando que si sale a luz pública que el virus fue creado en un laboratorio y que antes de que dejaran escapar el virus ya tenían pronta la vacunita, por fuerza la gente que estaba dispuesta a vacunarse lo pensaría dos veces. Esa misma gente, además, se entera de que la vacunita no ha cumplido sus fases de experimentación y por lo tanto, puede tener sus lindos efectos contraproducentes. Para colmo, para administrársela, hay que firmar un papelito por el cual uno limita su acceso a la Justicia en el caso de que ocurra algún desastre en su cuerpo, es decir, uno, por esa firma, "inmuniza" al proveedor de la vacuna, que es flor de capitalista. Pero todo tiene su contraparte: uno inmuniza al flor de capitalista que ya tenía la vacunita pronta antes de que largara a la cancha el virus, pero al menos uno se inmuniza del virus que el flor de capitalista largó a la cancha para jodernos a todos y enriquecerse. Sin embargo, no es así. Uno no se inmuniza para nada, y más bien, uno contagia de lo lindo luego de vacunarse, y como si fuera poco, puede morir de aquello contra lo cual se ha vacunado, o puede morir por algún desastre interno que haga la vacuna. Una y otra cosa han pasado y sólo las niega una persona ciega y obcecada.

Lo peor es que aquí no termina la cosa, pues ya vienen avisando que será necesaria una tercera dosis (con eso aumentan 50% los beneficios) y además, eternas dosis ante eternas nuevas cepas, y aunque usted no muera de un ataque cardíaco tras el experimento, y aunque usted no muera del virus creado en el laboratorio tras el experimento, nadie le asegura que no le hayan tocado alguna parte muy profunda de su ser. Nadie se lo asegura, pero si se pone a pensar que estos tipos crearon el virus, crearon la vacuna, le mintieron a cara de perro y le hicieron firmar a los Estados contratos secretos, con toda certeza la vacunita no debe tener nada bueno, y habida cuenta de la tendencia de los últimos siglos, uno puede asegurar sin el menor espacio a la duda que la vacunita va a alterar en algo la sexualidad.

Pero el hombre que lo piensa dos veces todavía considera algo más: fue comenzar el proceso de vacunación y las muertes aumentaron como por ensalmo. Esto ocurrió aquí, allá y acullá. "Correlación no es causalidad" me dice un loro que vuela a mi alrededor, y yo le digo que "Repetir frases hechas no es inteligencia" , y además, que expertos virólogos advirtieron que vacunar en plena pandemia, es hacer un virus más peligroso.

Todo esto debería hacer pensar dos veces a nuestro hombre, sin embargo, nuestro hombre no opera por razonamientos ¡pobres razonamientos! sino que es gobernado, como todos los demás, por fuerzas oscuras e incomprensibles de las cuáles no sabe absolutamente nada y si se las explicaran, abriría la boca en una carcajada homérica.

Deberíamos decir que nuestro hombre, tras pensarlo dos veces, terminará vacunándose por un asunto de fe, es decir, por fe en LA CIENCIA. Así son las cosas, confía, no en Dios, pues no cree en Dios, pero sí cree en LA CIENCIA y que sea lo que Dios quiera. Por otra parte, aunque desconfía del pulpo de los laboratorios, pues en su vida ha tenido sobrados motivos para desconfiar del pulpo, está dispuesto a sacrificarse para volver a la vida que extraña, una vida con asados, bailes, e incluso, sexo. Nuestro hombre ve al final del túnel una luz llamada "vacuna". "Si me vacuno" , piensa, o entrepiensa, "dejarán de jodernos" . De esta manera, cree que el lobo es lobo y al mismo tiempo, que no es lobo, o para ser más preciso, no quiere escuchar lo que todo su ser le grita al oído: los que dominan el mundo son personas muy jodidas que en sus ansias de poder son capaces de todo. Entonces, agacha el lomo y extiende el brazo para que un líquido desconocido que hará cosas desconocidas entre de lleno en su torrente sanguíneo.

Así que fe, esperanza y por último, sordera, llevarán a nuestro hombre a una habitación donde ocurrirá un desastre irremediable, sin embargo, esas tres cosas que dijimos responden a otra cosa, y esa cosa es la cosa que verdaderamente está en juego en este inicio de la nueva era.

Si crees que las revelaciones de la tramoya del imperio financiero abrirán los ojos de la gente que se rebelará a esta inmundicia, le asignás a la lógica y a la fuerza de los razonamientos una importancia que de ninguna manera tienen en esta vida. En cuanto al hombre, la lógica y la fuerza de los razonamientos son la parte visible del iceberg, y para ser más precisos, son la punta de hielo que se encuentra encima de la punta visible del iceberg. Todo lo demás son las fuerzas inconscientes que gobiernan al hombre, pues "El pensamiento es esclavo de la pasión" .

El viejo Blake decía que si un hombre había logrado aniquilar su deseo es porque su deseo fue lo suficientemente débil para dejarse aniquilar. Nada es sólo malo en este mundo. La pandemia, que inició una nueva era siniestra para el hombre, ha arrojado una luz inusual sobre todo. Se trata de saber qué fuerzas oscuras han llevado al hombre a dejarse acorralar, a dejarse encerrar, a negar su propio espíritu gregario, un espíritu gregario que ha sido ella base de todo lo que ha logrado, y que lo ha llevado a someterse a una vacuna sobre la que sabe en su fuero íntimo que será absolutamente nefasta para su porvenir.

Marcelo Marchese

 

 

 


 
Copyright © 2007 SURda All rights reserved.